El Alzheimer es una enfermedad
neurológica progresiva e irreversible que afecta al cerebro produciendo la
muerte de las neuronas. Es la causa más frecuente dentro de las demencias,
produciendo un deterioro de todas las funciones cognitivas.
No solo afecta a la persona que padece esta enfermedad, sino
que repercute de manera directa en la familia, son los familiares los que se
encargan de los cuidados que debe recibir el anciano con Alzheimer. la persona
sobre la que recae esta responsabilidad se denomina cuidador principal.
Cuidar en el ámbito del hogar incluye algunos tipos de
cuidados que se nombran a continuación: las actividades instrumentales
(cuidados domésticos) y los cuidados relacionados con las AVD (también
denominados cuidados físicos o cuidados personales), además se encuentran los
cuidados sanitarios más o menos complejos (actividad de gestión y relación con
los servicios socio-sanitarios) y los cuidados psicosociales.
El tiempo que suelen dedicar los cuidadores de estos
ancianos con alzheimer supone entre 8 y 20 horas diarias, siendo la
supervivencia media de estas personas con Alzheimer de 8 a 14 años. Los cuidados están
muy relacionados con las fases o estadios en que se encuentre el anciano con Alzheimer
y deben ser conocidos por el personal enfermero que colabora en la atención
primaria de salud y por las personas que lo cuidan.
Fases de la enfermedad:
El estadio inicial de la enfermedad puede durar unos dos
años y se dan fallos en la memoria a corto plazo, desinterés, humor deprimido,
cambios en la personalidad, episodios leves de desorientación y falta de
adaptación a situaciones nuevas. Sin embargo, en la fase intermedia puede
desarrollarse durante 3-5 años y el daño de la memoria es más comprometido y
afecta no solo a la memoria a corto plazo, sino también la de largo plazo. Surgen
alteraciones del lenguaje, la escritura, la lectura, el cálculo, apraxias y
agnosias. El anciano muestra dificultad con el aseo, el vestir o la comida y
pueden aparecer síntomas psicóticos. Además, en esta fase el paciente tiene
dificultad para mantener sus relaciones sociales y es incapaz de mantener una
discusión sobre un problema.
En la fase Terminal, ya demencia grave, el anciano es
incapaz de andar, se inmoviliza, se hace incontinente y no puede realizar
ninguna AVD. el lenguaje se hace ininteligible o presenta mutismo. A veces se
produce disfagia y hay riesgos de neumonías, deshidratación, malnutrición y úlceras
por presión. Los enfermos pueden permanecer en cama y suelen fallecer de una neumonía
u otra infección.
A medida que el Alzheimer y el nivel de deterioro cognitivo va
progresando, van apareciendo una gran cantidad de comportamientos, cuyas causas
pueden ser las siguientes:
- Causas con la salud física y el estado de ánimo:
- Los ancianos con Alzheimer son
muy sensibles a los efectos de la medicación, tanto por la sobremedicación como
por los efectos secundarios (caídas, mareos y temblores en las extremidades)
- El anciano sufre cambios en la
visión y la audición, las cuales van aumentando de forma que se van haciendo
mayores por causas que se pueden corregir si son identificadas a tiempo y
correctamente.
- Estos pacientes están
expuestos a una gran variedad de enfermedades agudas, las que, identificadas y
tratadas a tiempo, no tienen mucha importancia. Las crónicas son de larga
duración por lo que disminuyen considerablemente la calidad de vida, por lo que
los ancianos sufren cambios de comportamientos manifestados por: irritabilidad,
ansiedad, discusiones constantes, etc.
- Un periodo continuado de
estreñimiento puede causar una gran sensación de malestar y puede llegar a
producir estados delusorios.
- Pueden sufrir depresiones.
- Causas relacionadas con el entorno de la persona enferma:
- Un espacio demasiado grande
con demasiada o poca iluminación, lo que puede provocar confusión, mala
comprensión y entendimiento por parte del anciano.
- Falta de información o señales
de orientación ya que las capacidades cognitivas disminuyen.
- Causas relacionadas con las tareas o actividades que
realiza el enfermo:
- La tarea es demasiado
complicada para el anciano y esto puede ser muy frustrante.
El enfermero como sanitario en atención primaria, a la hora
de proporcionar acciones de promoción y prevención a los cuidadores de los
ancianos con Alzheimer. A continuación señalaremos intervenciones que deben
realizar los enfermeros:
-
Evitar reorientar al paciente más de una vez en cada
encuentro con él.
-
Permitirle comportamientos habituales siempre que esté
en un ambiente seguro.
-
Valorarlo en busca de signos y síntomas de depresión.
-
Mantener el ambiente estructurado, coherente establecer
una rutina fácil de seguir para él (fomento de la actividad física, terapia artística
y mostrarle un álbum para recordar).
-
Colocar etiquetas en distintas localizaciones para
ayudar a recordar su nombre y función.
-
Colocar un reloj y un calendario grande en su cuarto y
marcar con una “X” los días pasados.
-
Valorar hábitos intestinales y mostrarle la localización
del retrete.
-
En relación con el patrón del sueño, espaciar las
actividades intercalando descansos y evitar que se queden dormidos durante el día
(emplear paseos cortos o actividades).
-
Mantener breves y sencillos los mensajes verbales y
ayudarlo con las palabras olvidadas.
-
Vigilar la ingestión de alimentos, fomentar ingesta
adecuada de líquidos y establecer un horario regular para comidas.
-
Si hay momentos de violencia, cambiar del tema de conversación
y distraerlo.
-
Mostrar respeto por sus sentimientos.
-
Conservar su autonomía y evitar la sobreprotección.
-
Prudente administración de fármacos para controlar la
conducta.
-
En caso de depresión, no señalar los errores y fallos.
Fundación Alzheimer de España:
www.alzfae.org
Bibliografía:
Pérez Perdomo, M. ORIENTACIONES
PARA UNA MEJOR ATENCION DE LOS ANCIANOS CON ALZHEIMER EN LA COMUNIDAD. Rev
haban cienc méd. 2008; 7(4) . Disponible en: http://scielo.sld.cu/scielo.php?pid=S1729-519X2008000400021&script=sci_arttext